Un documento del Instituto Económico de la entidad advierte que nuestro país podría perder “nuevos negocios en el exterior y ventajas frente a los competidores dentro del bloque regional”. La mirada puesta en el negocio con Brasil.

El Instituto de Estudios Económicos y Negociaciones Internacionales de la Sociedad Rural Argentina (SRA) elaboró un documento, titulado “Agenda Mercosur y Agroindustria: Impacto de un posible abandono de las negociaciones”, mediante el cual se advierte sobre los efectos que podría tener un giro en la relación de la Argentina con el Mercosur, ante la reciente decisión del gobierno nacional de retirarse de la mesa negociadora de acuerdos comerciales con terceros países, como Canadá, Singapur y Corea del Sur.

Una decisión que recibió esta semana el rechazo de las entidades agropecuarias que conforman la Mesa de Enlace, y también de los integrantes de la cadena agroindustrial, quienes expresaron, por separado, su malestar ante el Canciller, Felipe Solá.

Para la SRA, si la Argentina avanza con la decisión anunciada días atrás, “nos deja afuera de nuevos negocios en el exterior y, al mismo tiempo, perderemos ventajas frente a nuestros competidores dentro del bloque regional. También estamos entregando nuestros mercados actuales a cambio de nada. Los acuerdos comerciales que estaría impulsando la mesa del bloque externo del Mercosur son de mediano y largo plazo y, lejos de afectar el despegue de la economía ante la caída provocada por la pandemia, permitiría seguir expandiendo los mercados para la producción argentina”, sostiene el informe.

La rural también cuestionó el argumento del gobierno de retirarse de la mesa de negociaciones. Al respecto, el informe asegura: “El argumento resulta cuestionable puesto que, de cerrase las negociaciones en curso, la entrada en vigencia de esos acuerdos se daría en el mediano o largo plazo, lejos de los efectos inmediatos de la caída de la actividad como consecuencia de la pandemia”.

Y se agrega: “Por el contrario, si Argentina persevera en llevar adelante estas negociaciones junto a sus pares del bloque, estos acuerdos podrían contribuir al aumento de la actividad económica y a la mejora del balance comercial, dos factores que son importantes para la salida económica del país, tan afectada por la pandemia y sus consecuencias sobre la actividad. En rigor, se estima que la caída puede rondar entre el 5% y 10%, según el escenario de profundidad y duración de la crisis”.

En otra parte del informe de la entidad que preside Daniel Pelegrina, se propone: “Instrumentar una política que permita orientar al Mercosur con el objetivo de potenciar la performance del bloque para convertirnos en una plataforma exportadora común de alimentos, energías renovables y servicios vinculados al Agro (Agtech). Y seguir teniendo nuestra voz en todas las instancias de diálogo y negociación, porque en un mundo integrado como en el que vivimos, las decisiones que puedan surgir de toda instancia de negociación comercial, tienen consecuencias importantes para el desarrollo económico de los países”.

Impacto en el Comercio

Del trabajo elaborado por la SRA, se desprende que la Argentina ha incrementado fuertemente el comercio intra bloque, ya que en la actualidad 4 de cada 10 dólares que la Argentina exportó a Brasil en 2019 corresponden a 30 productos agroindustriales para los cuales ese mercado “es un destino representativo y relevante de sus exportaciones”.

Estos 30 productos que Argentina exporta a Brasil representan unos 2.760 millones de dólares, siendo el 42% del total de las exportaciones argentinas al vecino país, y han crecido a una tasa efectiva anualizada del 4,1% en los últimos 18 años, lo que muestra a las claras la dinámica de estos negocios en el largo plazo.

“En particular, el comercio con Brasil tiene un vínculo muy profundo con las principales actividades económicas que se realizan en el interior del país. Por ello, se observa que todas las regiones económicas se verían afectadas de alguna manera por la posibilidad de tener alguna interferencia en el normal desarrollo del comercio en estos mercados”, señala el informe de la rural.

Si bien las exportaciones de trigo implican una gran parte de estas canastas de productos, con exportaciones por 1.165 millones de dólares, hay 29 mercancías cuyas exportaciones en conjunto representan alrededor de 1.600 millones de dólares al año. Las mismas, han presentado en conjunto una tasa efectiva de crecimiento anual del 6,1% en los últimos 18 años, convirtiéndose este destino muy relevante para el normal funcionamiento de sus mercados.

El comercio con Brasil presenta una amplia diversificación en productos con un nivel de comercio importante. El informe de la rural aporta los siguientes datos:

. Las exportaciones de malta, papas congeladas, cebada, ajos frescos, harina de trigo y leche en polvo, rondan entre 100 y 250 millones de dólares.

El aceite de oliva es uno de los productos que la Argentina exporta al mercado de Brasil
El aceite de oliva es uno de los productos que la Argentina exporta al mercado de Brasil

. Los envíos de porotos (sobre todo poroto negro), las carnes bovinas, filets de merluza, peras, aceitunas, vinos y quesos, rondan entre 50 y 100 millones de dólares.

También son relevantes las exportaciones de arroz, pasas de uva, cebolla fresca, manzana, aceite de oliva, lactosueros, ciruelas desecadas y aceite de girasol, que se ubican entre 10 y 50 millones de dólares anuales.

Si bien hay un grupo de productos, como la carne aviar, arvejas, alpiste, manteca, maíz, uvas frescas, sebo y nueces, cuyos valores de exportaciones son menores a los 10 millones de dólares anuales, en muchos casos mantienen una relación comercial de cercanía.

El mercado de trigo

La mayor parte del comercio de trigo en el bloque Mercosur está orientado al mercado de Brasil, que es el 7° importador mundial del cereal. Además, el trigo nacional es el segundo producto que importa Brasil desde la Argentina.

De acuerdo al informe de la rural, “Brasil importa anualmente 6,6 millones de toneladas de trigo, por un valor que ronda los 1.500 millones de dólares. El 91% del total del trigo importado proviene de los países miembros del Mercosur”.

 El 91% del total del trigo importado por Brasil proviene de los países miembros del Mercosur. Argentina es el principal abastecedor /Enrique Marcarian
El 91% del total del trigo importado por Brasil proviene de los países miembros del Mercosur. Argentina es el principal abastecedor /Enrique Marcarian

Salvo entre 2013 y 2015, cuando el gobierno de Cristina Kirchner restringió las exportaciones del cereal, en promedio la comercialización a Brasil alcanza las 5 millones de toneladas anuales y significa cerca del 30% de la producción argentina de trigo.

Uno de los principales beneficios que otorga el acuerdo Mercosur, es que los países miembros entran a Brasil con 0% de arancel, mientras que los países extrazona deben abonar un arancel externo del 10%. Esto representa un aliciente importante para el sector productor de trigo nacional.

Para los integrantes de la Rural, “los riesgos para el trigo pasan más por la posibilidad de perder una porción del mercado de Brasil, que por la posibilidad de ingresar en terceros mercados. Esta situación obligará a los productores argentinos a tener que trabajar su productividad para seguir ofreciendo el trigo en condiciones competitivas y así poder aprovechar las ventajas de la cercanía”, manifestaron.

Pero también existe una amenaza para la harina de trigo, ante la posibilidad que nuevos países ingresen al bloque con las mismas preferencias que tiene el mencionado producto. El año pasado las exportaciones de harina de trigo representaron el 13% del total de la producción nacional, con unas 645 mil toneladas exportadas, principalmente a Brasil y Bolivia. La mitad de las ventas al exterior de harina de trigo están vinculadas con el mercado brasilero.

Por último, y ante este escenario, desde la rural manifestaron: “Argentina vería muy disminuida su capacidad de negociación para acceder a terceros mercados. Adicionalmente, esta situación se daría en un contexto de fuertes restricciones al comercio, lo que sin duda podría llegar a agravar la posibilidad de recuperación de una parte importante del aparato productivo, sobre todo del interior del país”

Fuente: Infobae